martes, 21 de febrero de 2012

¡TODO LO TENGO QUE HACER YO!

"Siempre con el agua al cuello, que si los médicos de los niños, la lista de la compra, planificar las cenas y comidas, repetir a mis hijos continuamente que ordenen sus cosas, estar como un chofer llevándoles de aquí para allá… la verdad, no descanso en casa, prefiero estar fuera". Seguro que a más de una o de uno, esta situación le resulta familiar. Las tareas de la casa agotan, máxime si uno tiene la impresión de que lo hace una (o uno) y que su cónyuge o sus hijos no hacen nada.

¿Cómo conseguir y gestionar un hogar de manera que todos descansen y se sientan a gusto en casa? Todos los miembros de una familia necesitan aprender a crear hogar, producirlo y mejorarlo. Es aconsejable enseñar a los niños desde pequeños a controlar, por ejemplo, el carácter en casa -que es una habilidad para crear hogar- a hacer pequeños encargos de la casa, sabiendo que él es el responsable único de esa tarea o planificar entre todos el modo de descansar los fines de semana.
Cinco ideas para crear hogar:

1. Hablar con vuestros hijos de las diferentes tareas y definir encargos para cada uno.

2. Controlar, por un lado, el perfeccionismo, y por otro, la dejadez.

3. Tener una actitud positiva hacia las tareas del hogar y descubrir el lado divertido.
4. Poner metas realistas, sin querer hacerlo todo ahora mismo, por que no todo es urgente. El secreto no está en la cantidad de cosas que tenemos que hacer o en el tamaño de la casa, sino en el ambiente que queremos crear.

5. A principio de cada mes, podéis hacer una lista con las tareas domesticas de cada mes: la compra cada 15 días, la cita con el médico, comprar sábanas, arreglar algo roto, etc…

Y recuerda, mucha paciencia, ya que como dice el refranero popular en todas las casas cuecen habas… y no sufras que la "familia 10" ó "familia perfecta" no existe, la mejor siempre es la que uno tiene, pero mejorándola cada día.

jueves, 9 de febrero de 2012

HUELGA DE HAMBRE

¡Comprame el juego de la Play, Mamaaaaaaaa!. Pataleta, cara de pucherito, al suelo a llorar, seguido de una retaíla de continuos chantajes... "¿si me voy a la cama puntual me lo compras?"... ¿quién no ha vivido o ha visto esta escenita alguna vez?.

Que los niños pidan caprichos está dentro de lo probable en el transcurrir de su desarrollo. Lo importante es que los padres apliquemos el sentido el común y no concedamos aquellas cosas que no son necesarias o que no se las ha sabido ganar.

Educar no es condescender ni guiar con vehemencia, sino encauzar y sacar dentro de cada uno lo valioso que posee. El capricho mina la voluntad, la debilita, hace a la persona inconstante y débil; la convierte en esclava de sí misma y esclaviza además a quienes están a su alrededor.

Echar un pulso

El niño a esta edad quiere comprobar cuál es vuestra capacidad de aguante, cuántos llantos y qué volumen estáis dispuestos a tolerar para que él consiga lo que quiere. Mientras más seguros estemos de nuestro papel de educadores, más fácil nos resultará que no nos tomen el pelo.

Tres ideas para identificar y encauzar los caprichos para evitar que no acaben en huelgas de hambre:

1. Si tu hijo después de una tarde de club patalea en el hall de entrada para seguir jugando en el Tami, con cariño y paciencia le explicas que habíais quedado a esa hora en recogerle y que otro día seguiríais, ya que es un capricho que no es necesario consentir, aunque no pasa nada si extraordinariamente cedemos cinco minutos, pero no debe ser ésta conducta la habitual.

2. Si les damos responsabilidades en casa, encargos, crecerían en autonomía, y mientras más autónomos menos caprichosos, ya que si tu hijo descubre el placer de hacer las cosas por sí solo, no te pedirá que las hagas.

3. Recuerda por último, que al ceder a los caprichos del niño, estamos dando una buena razón para seguir haciéndolo.     

jueves, 2 de febrero de 2012

¿MI HIJO, PETER PAN?... NO, GRACIAS

A medida que un niño va creciendo, su maduración se concreta en mayor autonomía. A veces, con el paso de los años, sobre todo si la madre o el padre han evitado a su hijo cualquier dificultad, se sorprenden de que sus reacciones, a pesar de la edad, son todavía muy infantiles, interesadas, egoístas o poco recias. ¿Qué es lo que ha ocurrido? ¿Por qué es nuestro hijo distinto de los demás? No, no es distinto de los demás. Simplemente no se le ha enseñado a valerse por sí mismo. Todo, en esta vida, se aprende con ejercicio; también la maduración requiere un entrenamiento, una preparación progresiva.
A veces nos sorprenderá ver que chicos de 18 años no han adquirido todavía algunos hábitos fundamentales. Sin duda, convendrá enseñarles –y exigirles– estos hábitos, pero no será una tarea fácil. Sin embargo, si se han adquirido en la infancia, mantenerlos después de las turbulencias de la pubertad, será relativamente sencillo.

Algunos de los hábitos que un socio de Trassierra puede ir adquiriendo, progresivamente son:

-Levantarse puntual, hacer la cama y doblar y guardar el pijama.

-Limpiarse los dientes (aseo personal).
-Recoger el desayuno.

-Despedirse de mamá, con un beso y saludar al llegar a casa.

-Ir en medios propios de transporte.

-Organizarse los trabajos escolares (deberes).

-Prepararse él mismo la merienda.

-Preparar la cartera para el día siguiente o hacer la maleta cuando va de excursión.

-Ducharse sin que tengan que recordárselo.

-Doblar la ropa antes de ir a dormir y limpiarse los zapatos.

-Leer un buen libro.
-Intervenir, opinar en las decisiones de los planes familiares.

-Hacer él mismo las compras básicas.

-Dar cuenta del uso del dinero y tener sus ahorros.

-Utilizar correctamente los cubiertos a la hora de comer.

-Comer de todo, sin caprichos infantiles.

-Ordenarse su armario y su habitación.

-Escribir una carta, felicitación de navidad o una postal a sus amigos y parientes.

-Contestar el teléfono y tomar bien los recados.

-Ayudar en las tareas domésticas.

-Hacerse él mismo la maleta 

Y muchas cosas más que con un poco de ingenio podéis ir proponiéndoos… así que coge un lápiz y empieza a tachar las cosas que ya hace y subrayando las que va a empezar a hacer en pocos meses el cambio será notable.